La diseñadora Ángeles Verano presentó su nueva colección, “Amapola”, en la Fundación Cajasol en el centro de Sevilla dejando a todos los presentes impresionados por su buen hacer. Cierto es que la diseñadora portuense jugaba en casa, ya que entre el público se encontraban muchas caras amigas y personalidades y anónimos que han confiado en sus trajes de flamenca para ir ataviadas a la Feria. Pero también es cierto que no fue difícil sucumbir a la dulce primavera de Ángeles Verano.

Previo al desfile tuvo lugar la distinción “Flamenca con arte”, que en este 2023 ha recaído en la periodista Inmaculada Casal. Este galardón, que desde que por primera vez se otorgase en 2004, reconoce la labor divulgativa de la moda flamenca de quien lo recibe y nada mejor que la figura Casal, quien es una opinión experta en la materia.

Inmaculada Casal recibe el galardón de “Flamenca con arte” de manos de Ángeles Verano. Foto: Marta Sánchez García Villalon

La colección, caracterizada por su feminidad, ofreció una amplia gama de vestidos rojos, negros, azules y verdes combinados, entre otros, acompañados de estampados y lunares que añadieron un toque fresco y alegre como corresponde a la primavera, a la pasarela.

Y es que los vestidos de la colección “Amapola” han sido confeccionados con telas suaves y cómodas, lo que ha permitido a las modelos desfilar con libertad y gracia (y a quienes los llevan aguantar las maratonianas jornadas de Feria). Además, la combinación de colores y texturas crearon un ambiente vibrante en la pasarela, reflejando la pasión y dedicación de Ángeles Verano por su trabajo.

Ángeles Verano es un concepto

Y no lo dice quien escribe, sino Agustín Bravo, encargado de presentar el desfile. En la trayectoria de Ángeles Verano ha quedado patente que no hay dos vestidos iguales y que cada mujer tiene su propio traje de flamenca. En esta ocasión no había de ser menos. Una vez más, cada uno de los vestidos ha sido diseñado con cuidado y atención a los detalles, lo que ha permitido a Ángeles Verano crear una colección especial y, tal y como ella misma indica, “que huele a campo”. Los estampados, tonos y lunares han sido cuidadosamente seleccionados para complementar las líneas suaves de los vestidos y crear un look fresco y alegre.

La feminidad y elegancia fueron de nuevo uno los puntos fuertes de la colección “Amapola”. Los vestidos, con un cuidado patronaje, dieron como fruto ensalzar la belleza y la feminidad de las mujeres con líneas fluidas que otorgan facilidad de movimiento y elegancia. Porque, ¿de qué sirve un traje de flamenca si no puedes moverte con gracia?. Además, el algodón, lino y la seda que conformaban esta dulce primavera de Ángeles Verano añadieron un toque de ligereza y comodidad a las prendas haciendo que las mujeres se sientan cómodas y seguras de sí mismas.

Ángeles Verano no necesita demostrar nada y su mejor carta de presentación son los años tras el oficio. Y es precisamente esa fluidez y la tranquilidad de no tener que reivindicar un sitio pero a la vez ese “gusanillo” de querer superarse temporada tras temporada da como resultado una cohesión llena de verdad y alma. Y eso, a Ángeles Verano le sobra.