Está claro que Sevilla es una ciudad de cine por los diferentes escenarios y mezcla de culturas que encontramos no sólo en la capital hispalense, sino en toda la provincia.
En este artículo hacemos un recopilatorio de los principales escenarios que se han visto en los últimos años en la gran y pequeña pantalla de una Sevilla de cine.
Hace mucho tiempo, en una Sevilla muy muy lejana…

Comenzamos hablar de una Sevilla de cine desde una galaxia muy lejana. Fue por el año 2002 cuando la Plaza de España se convirtió en uno de los escenarios de Star Wars Episodio II: El Ataque de los Clones.
La construcción de Anibal González protagonizó durante unos segundos diferentes planos de un largometraje que se disfruta por todos los amantes de esta saga intergaláctica.
Alberto Rodríguez y su Sevilla de cine
Alberto Rodríguez soñaba con hacer cine su tierra. Lo hacía entre vasos vacíos por los bares de La Alameda, donde unos locos pensaban convertir su ciudad y su provincia, en el plató perfecto para realizar sus rodajes.

Hemos sido testigos de su visión de esa Sevilla marginal y pintoresca que podemos ver en 7 Vírgenes o Grupo 7, ésta última ambientada en los años previos a la celebración de la Expo 92.
La confirmación del éxito de esta visión de Sevilla se ha hecho palpable en el thriller de La Isla Mínima, con una curiosa visión de las marismas de Isla Mayor o el éxito de la serie de Movistar +, La Peste. Una visión oscura de esa Sevilla de contraste del siglo XVI en forma de thriller.

Sevilla de cine y…de tópicos
Ser sevillano tiene muchos tópicos. Prueba de ello lo podemos ver la película Ocho Apellidos Vascos, su presencia en Ocho Apellidos Catalanes y su consecución en formato serie con Allí abajo, utilizando como principales enclaves el barrio de Triana, el Palacio de Monsalves para el interior de la clínica donde trabajan los protagonistas y el Instituto Hispano Americano para su fachada.
Sin duda unos tópicos que en muchos casos pueden ser la realidad misma del sevillano miarma conquistador y en otras, una verdadera crítica a los caracteres que se muestran en estos títulos.
Así se ve el ejemplo de la salida de un paso de palio en Ocho Apellidos Catalanes, desde el barrio de San Bernardo y usando como extras a costaleros sevillanos y músicos pertenecientes a la Banda de La Presentación al Pueblo de Dos Hermanas.