Se dice que los lugares los hace su gente y verdaderamente esta aserción casa con la filosofía de AMA Hotel, un recóndito Resort instalado en Islantilla. La experiencia comienza nada más llegar: un camarero sonriente te ofrece una bebida y un sitio en su terraza mientras que se realiza el check-in. En ese tiempo, el viajero ya puede comenzar a sentir que no se va a hospedar en un hotel al uso. La decoración, con motivos arabescos renovados, invitan a echar la vista de un lado para otro. El restaurante Ostras! (el mejor considerado de la zona según Tripadvisor) a la derecha y Fandado a la izquierda. El visitante puede esperar en éste último, lounge de día (a precios nada disparatados en relación con la calidad del lugar) y club urbano con conciertos en directo por la noche.
Una vez comprobado que las atenciones hacia el cliente marcarán la estancia, toca el turno de visitar las habitaciones. 24 espacios (18 de ellas deluxe) con personalidad, diáfanos y cuidadosamente decorados. En todas ellas predomina el blanco, consiguiendo que la habitación se convierta en una zona de descanso y confort y olvidando que estás en un hotel.
La joya de la corona de AMA Hotels & Health Retreats es su carta de tratamientos estéticos, que van desde el acceso a spa, masajes… a tratamientos wellness: Detox, En forma, Pérdida de peso, Antiestrés y Antiedad pasando por novedosos tratamientos estéticos: Lifting con sutura de PDO, Plasma Enriquecido (PRP) o Terapia Cutánea con Microagujas.
Dos piscinas exteriores (una de ellas con acceso previo pago) y una oferta específica para los amantes del golf completan las propuestas. Pero las experiencias están para vivirlas, no contarlas. Obligatorio es probar el zumo AMA, (único en el hotel) mientras se observan las vistas desde la terraza.